España sigue invicta en la preparación tras superar en Gijón a la poderosa Lituania por 95-75 en un bonito y emocionante encuentro. Los de Pepu despejaron las dudas sembradas tras el partido contra Portugal y divirtieron a la afición con un buen juego. Lituania liderada por Jasickevicius inquietó a nuestra selección, y aunque llegaron a gozar de una diferencia de 10 puntos entre el primer y segundo cuarto, los de Butautas no consiguieron mantener su ventaja. España endosó a Lituania un 16-0 en un vendaval ofensivo, gracias al acierto ofensivo de Calderón y el alto nivel mostrado por Navarro y Rudy. El festival de triples del conjunto español fue decisivo. La ventaja (37-31) fue ligeramente reducida por los lituanos Kleiza y Siskauskas, pero los interiores Felipe y Pau tomaron el control y aumentaron la diferencia para llegar al descanso con un 47-38. A pesar de los continuos intentos por parte del conjunto lituano de acercarse, la selección, liderada por Calderón, dejó el partido casi decidido con 5 minutos por jugarse (80-67), aunque, como ya sabemos, en el baloncesto todo es posible y la selección no frenó su acierto ofensivo para alcanzar al final llegaron los 23 puntos de diferencia (92-69) para dejar el 95-75 final. Hablando de imposibles, el mago Jasickevicius lanzó la pelota desde debajo de su canasta y encestó un increible triple que obviamente, no cambió el ritmo del partido. En resumen, España vuelve a su nivel estelar de Japón y disipa muchas de las dudas creadas en los dos partidos anteriores.