Jordi Grimau logra la primera victoria para un Assigna Manresa que obtuvo un triunfo importantísimo en la cancha de un rival directo como es el Meridiano Alicante, que de nuevo perdió en los instantes finales.

El encuentro comenzó igualado sin un claro dominador y con muchos errores por parte de ambos conjuntos, notando la presión por la victoria. El Manresa se jugaba mucho y el Alicante tenía que demostrar que la victoria del Madrid no fue un espejismo. Acababa así el primer cuarto con dos puntos de ventaja para los locales.

El segundo cuarto fue dominado por completo por el equipo visitante con un Sergiy Gladyr, imperioso desde la línea de tres -6 de 8 desde la línea de 6,75-. La defensa manresana y el desacierto local hizo que el Meridiano Alicante acabara con 4 puntos -todos de Pedro Llompart- en el segundo cuarto, terminando con un 7% en el porcentaje de tiros.

Algo debió decirse en los vestuarios, porque los hombres de Oscar Quintana salieron a comerse el mundo y devolvieron con la misma moneda a sus rivales -24-8 al acabar el tercer cuarto- con Erdogan (20 puntos; 4/9 en tiros de 3) más acertado y haciendo daño por dentro con Andriuskevicius(10 puntos y 9 rebotes) y Doellman(12 puntos, 5 rebotes y 6 balones robados). Remontaban el partido e incluso tomaban cierta ventaja en el marcador.

Así continúo en el último cuarto con un parcial de 7-0, que aventajaba al Meridiano Alicante en diez puntos, pero de nuevo y como ya ocurriera ante Menorca y Fuenlabrada el equipo se durmió y los visitantes acortaron distancias, gracias a Alex Llorca(16 de valoración) y Rodrigo San Miguel(15 de valoración), hasta ponerse a dos puntos. Entonces emergió la figura de Jordi Grimau para resolver el partido, primero con un triple que adelantaba a los suyos. Más tarde sacando una falta de ataque a Justin Doellman y certificando la victoria con dos tiros libres. El partido concluía con 67-70 y una sonora pitada a Oscar Quintana. El equipo de Ponsarnau salvó un primer matchball.