Ayer ganó Boston Celtics, aunque sea un espejismo. Fue un partido en el que Boston tuvo altos porcentajes de tiro durante la primera parte del partido, moviendo bien el balón y encontrando tiros cómodos, llegando a tener una ventaja de 22 puntos en el tercer cuarto. Pero la realidad hizo acto de presencia, los Cavs pasaron de estar perdidos en defensa a defender con la intensidad habitual en ellos, LeBron James (42 puntos, 7 rebotes y 9 asistencias) dejó de atacar en estatico con tiros forzados y castigó a sus defensores con penetraciones y contrataques que o bien cababan en canasta o en tiros libres y Anthony Parker se dio cuenta a mediados del tercer cuarto que dejar un metro libre a Ray Allen (33 puntos) puede convertirse en triple seguro. A mediados del ultimo cuarto ya estaban empatados, y la constancia de Rajon Rondo y Ray Allen junto a un error por exceso de protagonismo de Lebron en la última posesión, hicieron que Boston sumaran una nueva victoria. Los Lakers perdieron contra un posible rival en playoffs, San Antonio Spurs 81-100, con Pau Gasol siendo otra vez el mejor de su quipo (32 puntos, 7 rebotes y 6 asistencias), e igualmente se podría decir de Manu Ginobili (32 puntos y 5 rebotes). Desde hace tiempo en Lakers algo no funciona, el banquillo (incluido el año pasado), pero si a eso se le une una baja muy importante (Bynum), y que dos de tus titulares no hagan buen partido, puede explicar los resultados de las ultimas dos semanas. Orlando también ganó (y estan a una victoria de Lakers) frente a Memphis 107-92. Oklahoma City Thunder tambien lo hicieron contra Timbrewolves 116-108 con 40 puntos de Durant. Además Los Knicks ganaron a Clippers con 10 asistencias de Sergio, Indiana anotó 133 puntos para ganar a Hosuton Rockets Y Golden State sumaron otra victoria (contra Toronto) para hacer que su entrenador, Don Nelson, igualara el récord de más partidos ganados en la historia, ahora le restan 6 partidos y rivales bastante asequibles para conseguirlo. Hoy no hay partidos NBA ya que esta noche se paralizará Estados Unidos para ver el acontecimiento baloncestisico del año, la final de la NCAA entre los invictos en la última treintena de partidos y a la vez sorpresón del año (Butler) y uno de los cabezas de serie (Duke), entrenados por el seleccionador del equipo nacional estadounidense, Coach K, y habitual en las finales (aunque desde hace 6 años no apareciera en ninguna)